Tienes que ser cuidadoso con lo que deseas en la oscuridad, porque Nosferatu podría escucharte. Y dejame decirte que él me escuchó.
Si me preguntás cuáles son mis criaturas mitológicas favoritas, siempre voy a responder que los vampiros. Desde chica tengo una extraña fascinación con ellos, con su estilismo y con su forma de moverse en el mundo de la noche. La primera vez que me sentí atraída hacia ellos fue cuando vi que mi hermana mayor estaba mirando Buffy, The Vampire Slayer. Lo que sentía era una mezcla de miedo y admiración. No podía comprender cómo Spike podía lucir como Billy Idol por un instante y, al otro, verse tan monstruoso.
Ese sentimiento sigue latente: la piel se me eriza al percibir el peligro que esas criaturas representan, pero, al mismo tiempo, no puedo evitar admirar la eterna belleza que utilizan para captar a sus presas.
Las últimas dos veces que sentí emoción por ver películas de vampiros fueron cuando esperaba religiosamente los estrenos de Inframundo y Van Helsing. Bueno, también con Twilight... por lo menos con la primera película. Saber que me iba a perder en un mundo de fantasía oscura me fascinaba. Así que cuando me enteré de que Nosferatu iba a tener una nueva versión, supe que el momento para las goth girlies había llegado.
Ellen Hutter y Thomas Hutter son una joven pareja de recién casados. Todavía sienten que están de luna de miel, que la magia entre ellos nunca se va a acabar, que el amor que tienen es más fuerte que cualquier otra preocupación. Pero Thomas sabía que era tiempo de volver al ruedo, que no podía quedarse toda la vida encerrado en su casa con su flamante esposa. Tenía que volver a trabajar para poder darle todo lo que se merecía. Quería brindarle una vida cómoda y feliz, demostrarle su amor, y la única forma de hacerlo era aceptando una oferta de trabajo de una persona muy peculiar.
Ellen estaba en desacuerdo. No quería que su esposo se alejara de su lado. Podría parecer que su ruego era egoísta, que su amor la cegaba, que no la dejaba ver la realidad del mundo en el que vivían. Para la época, necesitaba que su esposo proveyera para tener una buena vida, y la única forma de que eso fuera posible era dejándolo ir por un par de meses.
Pero la razón por la cual Ellen se negaba no era miedo al abandono. Era algo aún más profundo y oscuro. Podía parecer inocente ante los ojos de su amado esposo, pero debajo de esa piel, la que él acariciaba cada noche, se escondían secretos que nadie podría imaginar.
Ellen comprendió que debía dejarlo ir, que estaría bien cuidada en la casa de los amigos de Thomas, que nada le haría falta porque estaban bien económicamente. Además, se distraería con las hijas pequeñas de sus amigos. Thomas se marchó, pero no sin antes prometerle a su esposa que regresaría sano y salvo.
Ellen tenía una razón para no querer que su esposo se fuera, y no era la que Thomas o sus amigos creían. Necesitaba que se quedara para protegerla, porque sabía que algo la atormentaba en el único lugar donde nadie podía ayudarla: en sus sueños. Algo la perseguía y no la dejaba vivir en paz.
El día en que Thomas partió en busca de un mejor futuro para ambos, fue el día en que firmó la sentencia de los dos. Desde esa misma noche, empezó a experimentar sucesos extraños hasta que se encontró cara a cara con el Conde Orlok. Desde el momento en que sus ojos se posaron sobre su nuevo empleador, supo que había cometido un gran error. Mientras tanto, la pobre Ellen estaba sola, sin nadie que pudiera comprenderla realmente, sufriendo ataques nocturnos en los que la oscuridad tomaba su cuerpo y la hacía suya.
Estuve tres días debatiendo si esperar a mi hermana para ver la película juntas, porque ella también es fanática de los vampiros. Pero no podía seguir posponiéndolo, tenía que verla y dar mi opinión. Había escuchado un par de comentarios de gente que ya la había visto y, por suerte, no fue nada de lo que decían. Algunos vendían la película como si fuera un romance erótico, como si fuera un romance al estilo Crepúsculo. En mi opinión, no lo es.
El film es mucho mejor de lo que imaginaba. El terror gótico está en cada detalle: desde la cinematografía, con cada cuadro que parece una pintura, hasta los efectos especiales, que se sienten tan naturales. Me gustó mucho el cast porque, además de que los actores son muy talentosos, sus rostros lucían acordes a los 1800s. Agradezco no haber visto iPhone faces, porque eso me hubiera sacado completamente de la película.
Me encantó la apariencia del Conde Orlok. No me malinterpreten, es asqueroso, pero me pareció acertada la decisión de hacerlo lucir como Vlad III, vulgarmente conocido como Vlad el Empalador, en quien supuestamente se inspiró Bram Stoker para escribir Drácula.
Vi en redes sociales que decían que el Conde Orlok estaba enamorado de Ellen, pero no estoy de acuerdo. Nosferatu no es una historia de amor, sino un cuento sobre la obsesión de un monstruo despiadado con su víctima. Él aprovechó la soledad que reinaba en el corazón de Ellen para enredarla en sus mentiras y hacerle creer que él era el único que podía curar la tristeza que la atormentaba. Herr Knock describió a la perfección a su amo cuando hablaba de las palomas que estaba a punto de destruir: a Nosferatu solo le gustaban las cosas lindas. Le gustaba la fragilidad y belleza de esas criaturas que consideraba inferiores, para luego tomar posesión de ellas y drenar hasta la última gota de vida de sus cuerpos.
Bill Skarsgård hizo un gran trabajo como el Conde Orlok. Siempre nos tiene acostumbrados a grandes interpretaciones bajo prótesis y maquillaje. Lily-Rose Depp, en mi opinión, fue la revelación de este film, se nota que el talento corre por sus venas. Nicholas Hoult es un actor que admiro desde chica, y su interpretación de Thomas me fascinó. Y si Willem Dafoe está en una película, me siento obligada a verla porque sé que va a ser el mejor personaje.
Robert Eggers nos dio una probadita de lo grotesco y familiar que puede ser la oscuridad. Nosferatu es una película que refleja la sombra que todos acarrean, esa que, por más que tratemos de ocultar, siempre encuentra la forma de manifestarse en nuestras vidas. Y la única manera de deshacernos de ella es enfrentando nuestros miedos y dándoles pelea.
Espero que tengan la oportunidad de ver este film, porque estoy segura de que lo van a amar.